TENEMOS UN GRAN PROBLEMA

 

La democracia tiene un gran problema, la ciudadanía pronto no encontrará motivos suficientes para ir a depositar su voto en las urnas, es evidente que tienen –tenemos- un gran cabreo con la llamada clase política de este país, los ciudadanos se empiezan a creer que miren hacia donde miren todo está corrupto –o eso parece- y todos los políticos se corrompen, yo no estoy de acuerdo con esta teoría y desde luego no estoy de acuerdo con que todo el que se acerca a la política es por exclusivo interés personal.

 

Que duda cabe, la evidencia demuestra que un buen número de políticos y algunos –por no decir todos - partidos se corrompen, los medios de comunicación están todos los días con el tema en las noticias, no lo critico, es bueno que lo hagan y critiquen las practicas deshonestas de muchos personajes y personajillos de la política. 

Es vergonzoso que haya autonomías con casi la marca de corrupta, decenas de concejales y alcaldes marcados y hasta presidentes de gobiernos autónomos juzgados, es sabido que el levante español tiene el mayor número de políticos encausados por kilómetro cuadrado, algunos juzgados o a punto de serlo, los ciudadanos quedan sorprendidos de ver como algunos se escapan porqué el juez de turno dice que el procedimiento tiene algún defecto de forma, es público y notorio en el caso Zaplana, hoy directivo de Telefónica.

 

Lo que parece que a colmado el vaso ha sido las noticias de este fin de semana, que tienen como protagonistas Barcenas y el PP, un tío que por lo visto mantenía despacho en la sede del partido con coche y secretaria, que vive en el mejor barrio de Madrid sin que se le conozca ingresos declarables y que tiene a su mujer en paro, aunque es la dueña de todo el patrimonio. 

No me estoy refiriendo únicamente en  el caso de la corrupción al PP, que más quisiera yo, por desgracia la contaminación va más allá  del partido, del gobierno, la corrupción es una lacra que no tiene colores ni ideología política, aunque yo pensaba y pienso que en unos se da más que a otros, por la red circula una lista de unos 200 nombres con apellidos y con cargos anteriores y actuales de personas presuntamente corruptas, lo que más enfada al personal es que sentencias hay pocas, y algunas con 20 años de retraso como la del Caso Pallerols, otras van por el mismo camino. 

Es difícilmente justificable algunos personajes de la política española algunos casos con    gran evidencia de haber sido amigo de lo público terminen siendo cargos de empresas muchas veces cercanas a la órbita del sector público, el ejemplo más vergonzante es el edificio de la Gran Vía madrileña –Telefónica – la mayor parte de sus consejeros tendrían que estar en la cárcel o cuando menos apartados de la gestión de cualquier empresa. 

Una vez más los dirigentes de los partidos tratan de apaciguar a la opinión pública con remedios que no han dado resultado, Rajoy despistado como siempre, cuando a surgido el caso Bárcenas se le ocurre la gran solución, proponer un acuerdo entre partidos para atajar el tema y dos auditorias para como dicen en Latinoamérica -chequear- su partido, sigue vertiendo dudas y aumentando el cabreo, ¿como es qué no se ha propuesto el acuerdo mucho antes?, si tiene que auditar la cuentas de su partido ¿que han estado haciendo hasta ahora sus dirigentes?. 

La solución siempre parce ser el hacer unas normas de obligado cumplimiento donde se declare el patrimonio de los diputados, concejales y todo cargo público, pues tampoco parece ser el remedio, es verdad que el caso Bárcenas arranca desde el caso Gürtel, ya es un caso “viejo” pero hace mucho tiempo que hay obligación de declarar los bienes de cada uno cuando se toma posesión del cargo, cada mandato en el caso que repitas y con el gobierno Zapatero, se promulgó una ley que obligaba a hacer público a los diputados y senadores su patrimonio, como se ve tampoco funciona. 

Es posible que la solución sea un compromiso político de todos los partidos para renovar el noventa por ciento de las listas y de los miembros de las direcciones de los partidos, hacer una ley que inhabilite a los corrompidos y los corruptores para ocupar puestos en la direcciones de empresas públicas o privadas, que no parezca que una vez fuera de los parlamentos o de los gobiernos se rían del pueblo y encima ganan mucho más dinero, seguro habrá quien diga que lo mejor no es votar, pero no olvidemos que siempre habrá alguien que haga la política y que la democracia es el mejor sistema que se ha inventado. 

No obstante la mayoría de las veces los medios, cuando publican estas desgracias democráticas, tampoco son del todo justos y en muchas ocasiones no publican una parte interesada de la noticia, pocas veces oímos el nombre de los corruptores de los jefes de las empresas, bancos o corporaciones que se benefician y benefician a los partidos y a los políticos corruptos, al contrario muchos de los que son sospechosos de mala práctica son indultados y los contratan con cargo donde ganan mucho más dinero.

 

 

Saludos