¡EXIJO TAMBIÉN MI LIBERTAD!

 

Está de moda apelar a la libertad de cada uno para cualquier cosa, principalmente para no ponerse la vacuna, para irse de fiesta, de comidas y cenas de empresas o de amigos, también hay los que se van de cena a casa de los padres o los abuelos pensando que estos no cogerán el maldito virus, eso sí, son tan idiotas que hacen cola 15 días antes para ponerse la primera dosis o hacerse un PCR aunque los expertos digan que no son fiables.

Yo me pregunto dónde queda la libertad de los que no queremos ser contagiados, cuando vamos a un restaurante, bar o simplemente a pasear por las calles de mi ciudad (Badalona) o de cualquier otra ciudad o pueblo, estos tontos proteccionistas de “su libertad”, no piensan en los demás, les importa una mierda cual sea el nivel de contagio y de las conveniencias de las vacunas, algunos son tan tontos que hemos llegado a ver y oír en los medios que falsifican el certificado COVID 19, yo a estos les daría una buena hostia con la mano abierta y los llevaría a un centro donde curen el COVID 19, no para que se contagien para que vean los resultados de su irresponsabilidad.

Los gobiernos de media Europa están preocupadísimo con los índices de contagios y vuelven a proponer las restricciones y en algunos casos el confinamiento, hablan de poner la tercera, cuarta vacuna, incluso ya la quinta, ¿no sería más práctico que obligaran al personal que se pusiera la primera y la segunda dado el nivel de contagio que tienen?

Sé que me meto en un charco pero yo no permitiría que personas que no se quieren vacunar puedan trabajar en ningún sitio atendiendo al público. Es incompresible que tengamos una sanidad pública de las mejores y que se diga que hay sanitarios y médicos que no quieren vacunarse, tampoco comprendo que sus compañeros de trabajo no lo denuncien.

Han muerto miles y miles de ciudadanos y otros muchos miles se contagian cada día, no vale que nadie especule con si son más o menos, no hay que echar la culpa al gobierno, algunos les culpa de todo pero de colaboración poca y de crítica y filibusterismo político mucho.

Por último pido a los jueces que no hagan política con sus sentencias y que el Consejo del Poder Judicial y el Tribunal Supremo armonice sus decisiones respecto al tema que está pareciendo que cada uno hace de su capa un sayo en función de quién mande en una comunidad autónoma, que cuando se pronuncien en temas de libertades individuales también tengan en cuenta la de los demás aunque no hayan recurrido a los jueces

Saludos